La Iglesia de San Sebastián se localiza en el denominado “Barrio de Curtidores”, dentro del cual se enmarcarían antiguamente construcciones defensivas como la puerta de Bab al-Dabbagin o “puerta de los Curtidores”. Se encuentra situado en la calle Carreras de San Sebastián, muy próximo a los Baños islámicos de Tenerías.
A través de las fuentes documentales, así como del estudio de muros y la excavación arqueológica realizada durante esta restauración, se ha podido concluir que la actual iglesia de San Sebastián ha sido un edificio con una ocupación continua, desde el siglo X hasta el XX, con una primera fase islámica y una segunda cristiana.
En los siglos XIV y XV se realizan una serie de pequeñas reformas en el edificio que no están demasiado claras. En las obras de esta fase es donde se podría encuadrar la actual torre de la iglesia, que presenta un aparejo que podríamos fechar en torno al siglo XV. En el siglo XVI se emprende una agresiva intervención en el edificio de la que tenemos constancia a través de documentos escritos de la excavación arqueológica. En el año 1916 se emprende la última reforma del edificio. De ese momento data la reconstrucción del artesonado de la nave de la Epístola.
Durante la rehabilitación, se ha intentado una actuación respetuosa con los materiales, acabados, colores y texturas, buscándose el diálogo sereno y sin protagonismos de los nuevos materiales propuestos. Se ha procurado la restauración frente a la sustitución.